Una semana después de la controvertida y caótica organización del espectáculo de Bad Bunny en Ciudad de México, se supo que Ticketmaster no había duplicado las entradas del concierto. Esta revelación se produjo a raíz del concierto. Debido a que no había más asientos disponibles, el concierto se agotó y miles de fans de Bad Bunny se sintieron decepcionados.
Este lunes, Ricardo Sheffield, titular de la Profeco, reveló que la desorganización que se presentó en ambas presentaciones se debió a un problema con el sistema de boletaje que utiliza la empresa.
El caos de Bad Bunny
Es bastante improbable que se haya comprado dos veces. De acuerdo con un funcionario que habló durante la conferencia de prensa diaria que ofreció el mandatario, no pudieron registrar con éxito los boletos debido a una interrupción en la señal que se presentó cuando utilizaban pistolets que leen códigos de barras.
Los videos de las cámaras de seguridad del Estadio Azteca fueron examinados por funcionarios de la Profeco, y revelaron lugares vacíos durante un concierto que tuvo lugar el 9 de diciembre. Este descubrimiento demuestra que la corporación pudo acomodar a los más de 5 mil pasajeros impactados, pero descarta la posibilidad de que se vendieran boletos duplicados por falta de espacio disponible.
En República Dominicana lo siguen esperando con muchas ansias.
