La Cámara de Representantes vivió unos días dramáticos, luego de que legisladores republicanos “rebeldes” se decidieran a no dar su voto al candidato del partido. Durante cinco días, las votaciones no arrojaron como ganador a ningún candidato, hasta finalmente, Kevin McCarthy se convirtió en el presidente de la Cámara.
Diversas negociaciones se realizaron dentro del seno del partido republicano para poder lograr este resultado. El grupo de legisladores republicanos que estaban en contra de la candidatura de McCarthy era un grupo adepto al expresidente Trump. Inclusive, los rumores aseguran que fue el propio exmandatario quien llamó a los legisladores para que quieran su apoyo al líder republicano.
Está confirmado que al menos llamó a dos de los congresistas, para ser más específicos, a Matt Gaets y Andy Biggs. Una vez que terminó la conversación, ambos decidieron cambiar su voto, lo que ayudó a la victoria de McCarthy. Este “atasco” que había dentro de la Cámara impedía que se pudieran empezar a llevar a cabo las tareas regulares de los legisladores, ya que este es un paso importante.
El tiempo de votación se convirtió un hecho histórico, ya que la última vez que ocurrió un caso similar fue en 1923, donde se necesitó más de una sesión. Sin embargo, el récord histórico ocurrió en 1869, cuando los legisladores tuvieron que realizar 60 sesiones hasta finalmente elegir un nuevo “speaker“.
Los legisladores republicanos ocasionaron un “atasco” como forma de protesta
Los legisladores republicanos que estuvieron en contra de la candidatura de McCarthy lo hicieron como una forma de protesta. Este grupo culpaba al líder de la bancada republicana por los malos resultados en las elecciones del pasado noviembre. A pesar de que los republicanos obtuvieron una mayoría, no fue la victoria aplastante que esperaban tener.
A pesar de la mayoría que obtuvieron, la bancada republicana no demostró solidez durante las primeras sesiones de la Cámara de Representantes. En este sentido, no se sabe que esperar de ellos en los próximos meses y durante el resto del periodo. Por el momento, Joe Biden ha tendido su mano a los legisladores republicanos, para poder trabajar en conjunto por el país y su proyecto de gobierno.