Para nadie es un secreto que actualmente, dentro del Partido Republicano en los Estados Unidos y una clara muestra de esto es que no fueron capaces de sustituir a Nancy Pelosi, a pesar de que cuentan con mayoría en el congreso. Sin lugar a dudas, esto se trata de gran problema que el partido deberá resolver si desea seguir manteniendo su posición de poder en el país.
De hecho, es la primera vez en un siglo que la Cámara de Representantes no ha sido capaz de nombrar un nuevo líder en una única votación. Incluso, el propio líder de la bancada republicana, Kevin McCarthy intentó hacerse con el cargo en varias ocasiones. Sin embargo, las propias disputas dentro del partido impidieron que lograra su objetivo.
Será el próximo miércoles cuando se realice nuevamente la votación para elegir quién será el nuevo líder de la cámara para este nuevo periodo. Hay que destacas que esta votación es de vital importancia, ya que el Congreso no puede avanzar en su trabajo hasta que no se designe un nuevo líder.
Actualmente, el Partido Republicano, cuenta con 222 y solo necesitan 218 votos para elegir un nuevo líder, por lo que esto puede parecer algo bastante sencillo en un principio, pero no lo es. Las diferencias entre varios grupos dentro del partido hicieron imposible la elección, ya que solo pudieron obtener 202 votos. Por su parte, los demócratas apoyaron a su candidato, Hakeem Jeffries, quien consiguió 212 votos, insuficientes pasa poder salir vencedor.
Ante los resultados obtenidos, los demócratas aseguraron que ellos si están unidos, pero no cuentan con los votos suficientes para decidir quién será el nuevo líder. En las próximas votaciones se espera decidir quién ocupará el cargo de líder del congreso para este nuevo periodo.
El Partido Republicano está dividido
El pasado 8 de noviembre se eligieron los nuevo representantes que ocuparán los escaños del Congreso durante el próximo periodo. A pesar de que las elecciones estuvieron bastante ajustadas, los miembros del Partido Republicano consiguieron hacerse con la mayoría en la Cámara de Representantes. Ante esto, pueden llegar a complicarle las cosas al presidente Biden durante sus últimos años en el poder.
El resultado obtenido por el Partido Republicano estuvo alejado de lo que vaticinaban como una “ola roja”, pero lo cierto es que solo consiguieron 10 escaños más. Sin embargo, los actuales miembros de la cámara no parecen estar alineados al 100% con las pretensiones del partido.
Dentro del Partido Republicano hay dos bandos, los que culpan a Trump por el desempeño electoral, ya que a pesar de no ser presidente y de estar siendo acusado, tiene un papel protagónico dentro del mismo. Por otro lado, están quienes culpan al líder de partido, Kevin McCarthy, ya que creen que su campaña fue insuficiente.
En cualquiera de los casos, lo cierto es que existe esta división, la cual pueden aprovechar los demócratas quienes si parecen estar unidos dentro de la cámara. Solo resta esperar, para saber si logran unirse como partido y definir al nuevo líder de la Cámara de Representantes el miércoles.