Dos hermanos de apellido Burell y un pescadero en Harlem identificado como Francisco Morales, se vio involucrado en un altercado mortal al percatarse que estos dos sujetos irrumpieron en el lugar para robar parte del producto. De hecho, el pescadero, dijo que:
“Vi lo que estaba haciendo, estaba robando. Si no estuviera robando, no hubiera pasado nada”, y es que uno de los sujetos que perpetraba el robo se vio herido, pero el otro falleció.
En la tienda Fish Express Fish Mart, entraron Robert y Malik Burell, quienes según el testigo querían robarse los camarones del lugar, pero todo terminó mal, sobre todo para Malik.
¿Qué fue lo que ocurrió?
Según cuentan los testigos al New York Post, los hermanos Burell entraron con intención de robar camarones, pero Morales se dio cuenta, y es allí cuando otro empleado de la tienda, de nombre Junior Hernández, interviene y apuñala a Robert y Malik.
Debido a este hecho, Malik, por las heridas producto de las puñaladas proporcionadas, murió, por ende, a Hernández se le acusó de homicidio, aunque conociendo el contexto, los cargos se redujeron a asalto.
Por su parte, Robert, quien también resultó herido, fue llevado al Hospital Bellevue en Manhattan, y a pesar de que se le acusó de robo, fue puesto en libertad, con lo que morales no estuvo de acuerdo, ya que Morales exigió que Robert Burell debería ir a la cárcel.
Sin embargo, Hernández, quien actuó ante los hechos de asalto, manifestó no sentirse bien por la manera en que había actuado, después de todo, le quitó la vida a una persona que también tenía familia.
La esposa de Hernández, para defender a su esposo, dijo que nadie debería pasar por esa situación, menos en un lugar de trabajo, además añadió que: “Quiero que se retiren el resto de los cargos. Fue en defensa propia y espero que ellos también lo vean de esa manera”.
Más casos de apuñalamientos
Todos los días se reportan casos de apuñalamiento en New York, y el de los Burell no será el último, y es que las razones por las que esto ocurre son variadas, siendo una de las ultimas que causaron conmoción, fue el apuñalamiento de una niña de 7 años propiciada por su propia abuela, aunque la pequeña sobrevivió.
Sin embargo, no todos tienen tanta suerte, pues también en New York, y por un propio familiar, una mujer falleció después de recibir puñaladas de su propio hijo, con quien solía distucitr de manera frecuente, declarada muerta en la escena.